La Fiscalía Nacional Económica (FNE) solicitó al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) que rechace la consulta iniciada por Transbank sobre la implementación de un nuevo régimen tarifario.
La solicitud había sido presentada por la empresa a fines de mayo. En esa oportunidad, Transbank argumentó que la liberalización del margen adquirente es necesaria dada la evolución del mercado, el aumento de la competencia, el crecimiento de los pagos digitales, la interoperabilidad plena y la fijación de límites a las tasas de intercambio.
Según el informe de la División Antimonopolios de la Fiscalía, la empresa no cumple con los requisitos necesarios para someter a aprobación un nuevo sistema de cobros, y dice que ésta debe seguir bajo la obligación de autorregular el cobro de los “merchant discounts” -comisión que se cobra a los comercios que aceptan pagos con tarjetas-, de acuerdo con lo establecido en el Avenimineto de 2005 y según lo dispuesto por la Corte Suprema en 2022.
El documento fue elaborado en respuesta al procedimiento iniciado por Transbank en mayo de este año, con el propósito de determinar su margen adquirente bajo el modelo de cuatro partes (M4P) en el mercado de los medios de pago.
¿Por qué la FNE se opone a la propuesta de Transbank?
Dentro de los aspectos detallados, la FNE enfatizó que, para la fecha en que se presentó la consulta de Transbank, no se habían cumplido las condiciones estipuladas por la Corte Suprema para la implementación de un nuevo sistema tarifario. Estas condiciones incluyen la reducción significativa de las tasas de intercambio y de los costos de marca, así como la completa interoperabilidad entre los agentes del mercado de medios de pago.
Asimismo, el informe reveló que no existía, ni se anticipaba, una reducción significativa de dichas tasas y costos, factor clave para evitar un incremento en los gastos para los comercios al aceptar tarjetas. Además, se identificó que, aunque se han realizado avances en la interoperabilidad, aún persisten obstáculos que dificultan la participación competitiva de diferentes operadores de tarjetas.
En cuanto al sistema tarifario propuesto por la compañía, la FNE sostiene que no puede ser aprobado en sus términos actuales, ya que el modelo de costeo utilizado por la empresa no refleja de forma adecuada el costo económico real de sus actividades, violando así la normativa de autofinanciamiento establecida por la Corte Suprema.
De manera similar, la entidad advierte que el sistema tarifario incluye la capacidad de igualar tarifas de competidores y la exención de la aplicación de tarifas reguladas en licitaciones publicas, elementos considerados anticompetitivos por la Corte Suprema.
Respecto a las condiciones de mercado, la FNE concluyó que Transbank sigue teniendo una posición dominante, destacando su participación en el rubro y la oferta exclusiva de ciertos servicios y funcionalidades.
Solicitud de la FNE no se justificaría según varios organismos y existe preocupación por aceptación de tarjetas en compras por bajos montos
El Banco Central comentó sobre los cambios sustanciales en el funcionamiento del mercado, haciendo hincapié en los cambios normativos, la tendencia a la baja en la participación de Transbank en el procesamiento adquirente y el aumento de la competencia actual y potencial.
En lo que respecta al modelo tarifario mixto, la entidad ha dicho que se debiera reducir la probabilidad de que los comercios no decidan aceptar Tarjetas de Pago para ventas de montos relativamente bajos, lo que contribuiría a la masificación de los medios de pago digitales.
Recordemos que ahora la comisión que pagan los comercios por los pagos que reciben con tarjetas se define por las tasas de intercambio, un porcentaje que va a los emisores (como bancos) según el monto de la compra; el costo de marca, que va a empresas como Mastercard y Visa; y el margen adquirente, que es lo que recibe Transbank por cada venta realizada y que, según un fallo de la Corte Suprema del año pasado, quedó determinado en un monto fijo por compra, independiente del monto, lo que afecta la aceptación de tarjetas cuando los montos son bajos.
La Comisión para el Mercado Financiero (CMF), en tanto, ha confirmado que no existen dudas de que en la actualidad el mercado opera en un modelo de cuatro partes.
En ese sentido, existiendo una fijación a los límites de las tasas de intercambio, sería excepcional que en el derecho comparado se deba regular el resto de la comisión, lo que no se justificaría en mercados donde existen múltiples operadores. Recordemos que a Transbank en el último tiempo le ha salido competencia, como Compraquí, Getnet, Kushki, Mercado Pago y Bci Pagos.
Por su parte, desde Transbank defendieron su posición y expresaron confianza “en la robustez de los argumentos presentados al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia —confirmados además por la CMF y el Banco Central— que dan cuenta de los esfuerzos continuos de la compañía por contar con un sistema tarifario respetuoso de las directrices de la Corte y que al mismo tiempo vayan en beneficio de nuestros clientes, como siempre ha sido el norte de Transbank. Por ello, esperamos que en el proceso ante el Tribunal, de carácter técnico, se acojan nuestros planteamientos”.
