Su voz, su visión y sus proyecciones son una de las más respetadas en los mercados. El economista jefe de Latam de Itaú, Andrés Pérez, compartió su mirada sobre el panorama general de la economía chilena y sus estimaciones para 2024.
Respecto del IPC de julio, que registró una variación de 0,4% —lo que, para muchos, estuvo por sobre las expectativas del mercado— puso paños fríos. “Si uno hace ‘doble clic’, tampoco fue tan grande la sorpresa. Fue un 0,35%, no 0,4%. Teníamos una proyección de 0,32%. Entonces, ¿fue una sorpresa al alza? Sí, pero para la magnitud de las sorpresas que hay de inflación en Chile, fue acotada”, aseguró.
Para agosto, preliminarmente, proyectó un IPC de 0,2%. El economista anticipó que la inflación experimentará un descenso durante los próximos meses, cerrando en 4% anual hacia finales de 2023. No obstante, Andrés Pérez hizo hincapié en que esta cifra puede variar dependiendo de los eventos externos que puedan ocurrir.
“Es probable condicionar a lo que vaya ocurriendo con los distintos tipos de choques que sí están pegando con un poco más fuerza en el resto de la región, o con choques climáticos, por ejemplo. También lo que puede ocurrir con los precios de los alimentos por el conflicto que entre Rusia y Ucrania. Lo más probable es que la inflación caiga por debajo del 3%, y que esté en torno al 2%-2,5% durante el segundo trimestre del próximo año”, explicó.
Tasas de interés en Chile y en la región
El economista —quien hasta hace dos años se desempeñaba como coordinador de finanzas internacionales del Ministerio de Hacienda— analizó de las tasas de interés de los diversos países de la región, enfocándose particularmente en Brasil y Chile. Resaltó que ambas naciones presentan un comportamiento similar, cada uno alineado con sus respectivas metas.
“Vemos que Brasil y Chile fueron los primeros en subir la Tasa de Política Monetaria (TPM) y también son los primeros en bajarla. Brasil empezó a caer con más fuerza, primero, y ya está en torno a la meta. En Chile alcanzó un máximo mayor al de Brasil con respecto a la meta y ya está cayendo con fuerza”, aseguró Andrés Pérez.
Sin embargo, indicó que llama la atención que en Colombia la inflación se ha mantenido más alta debido a una mayor resiliencia de la actividad, los subsidios a combustibles y un aumento más sostenido del precio de los alimentos.
En el caso de Chile, Pérez cree que “el Banco Central va a seguir bajando las tasas a un ritmo de 100 puntos base en cada reunión de aquí a fin de año, llevando la tasa a 7,25%. Esperamos que las tasas de instrumentos como el crédito comercial, hipotecario y de consumo también empiecen a reducirse, y eso debería contribuir en el margen a un poco más de dinamismo en la inversión”.
Esto continuaría con la tendencia a la baja que comenzó a evidenciarse el pasado mes de julio, cuando el Banco Central anunció un recorte de 100 puntos base.

¿Qué pasará con el dólar?
Respecto del tipo de cambio, el ejecutivo indicó que la depreciación del peso chileno en las últimas semanas refleja los ajustes en las expectativas de tasas. Sin embargo, matizó que la situación no es tan distinta a la de otras economías emergentes de la región como Perú, Colombia y México.
En este sentido, destacó que “es natural que nuestro tipo de cambio sea volátil. Es parte de nuestro esquema de flotación cambiaria, pero también los niveles extraordinarios de volatilidad que tuvimos ya se están normalizando”.
¿Deberíamos acostumbrarnos al dólar en los nievesl actuales dólar? Andrés Pérez cree que sí. Sin embargo, aseguró que “lo que podría contribuir a un fortalecimiento mayor del tipo de cambio es justamente que la economía vuelva a un mayor ímpetu. Ahí es clave también la reducción de la incertidumbre, (ya que) sigue existiendo un castigo para los activos chilenos en un sentido amplio. Si bien se ha reducido (la incertidumbre), tenemos que acostumbrarnos a estos niveles”. Su apuesta es que mantendrá cercano a $830 hacia fin de año.
Al ser consultado por el impacto de la incertidumbre sobre el actual tipo de cambio del dólar, explicó que —dependiendo de los modelos— llegó a registrar un máximo superior a los $200. “Ahora estaría por debajo de los $100, pero sigue ahí. Se puede seguir reduciendo, pero requiere acuerdos”, sostuvo.
Crecimiento económico e inversión
Andrés Pérez, economista jefe de Itaú, hizo sus apuestas para la economía chilena: “Hasta el año pasado, pensamos que la economía se iba a contraer en torno a 1,5%. La verdad es que, por distintos factores, la economía ha respondido mejor. Hemos tenido distintos tipos de choques que han sido favorables y lo más probable es que este año tengamos una contracción en torno a 0,5%”.
De hecho, advirtió que “es muy pronto para hablar de brotes verdes”. Su estimación es que el tercer trimestre registrará una contracción de -0,2%, mientras que en el cuarto crecerá un 0,2%, en ambos casos respecto del periodo anterior.
En tanto, para 2024 fijó las expectativas de crecimiento de la economía chilena en un 1,8%, ligeramente inferior al 2,0% que espera el mercado.
Sin embargo, Pérez advirtió algunos desafíos clave para la economía, como el aumento sostenido en los tiempos de obtención de permisos para el desarrollo de proyectos.
“Es el principal cuello de botella que tenemos nosotros hoy en día. El tiempo de aprobación que viene subiendo hace varios años, después tienes la reanudación de permisos que también excede ampliamente el plazo”, sostuvo. Para el próximo año, se espera una caída en la inversión privada de entre 1% y 2%.