Viajar en bus es una de las opciones más comunes y económicas para desplazarse entre diferentes ciudades de Chile. Sin embargo, es fundamental tener en cuenta la importancia de elegir servicios de transporte y buses interurbanos que estén autorizados, ya que esto garantiza la seguridad de los pasajeros y el cumplimiento de sus derechos en caso de accidentes.
La Ley de Protección de los Derechos del Consumidor, en su artículo 3 letra F, establece que es obligación de los consumidores celebrar operaciones de consumo únicamente en el comercio establecido. En la práctica, esto implica que solo se pueden adquirir pasajes en buses interurbanos autorizados, evitando así los conocidos como “piratas”.
Elegir un servicio de transporte oficial no sólo cumple con la ley, sino que también protege a los pasajeros en caso de accidentes. Si viajas en un bus autorizado, los pasajeros pueden acceder a indemnizaciones y al Seguro Obligatorio de Accidentes Personales (SOAP).
El Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones mantiene un Registro Nacional de Transporte Público y Escolar. En este sistema deben inscribirse todas las modalidades de servicio de transporte público remunerado, así como los vehículos destinados a prestarlos.
Este registro es de carácter público, lo que permite a los usuarios informarse sobre la legalidad de los buses interurbanos visitando el sitio web del registro. Además, las autoridades mantienen un ranking de accidentabilidad de cada empresa que se actualiza de manera irregular.
Consejos al momento de viajar en bus dentro de Chile
En cuanto a los pasajes, los consumidores tienen derecho a que se respeten los precios informados y a recibir información veraz y oportuna sobre el servicio ofrecido.
Según la Ley del Consumidor, las empresas de buses interurbanos deben garantizar condiciones de seguridad e higiene adecuadas y cumplir con lo prometido, como la puntualidad en las horas de partida y llegada, y el itinerario. Además, no pueden sobrevender pasajes y, si el consumidor anula su pasaje con 4 o más horas de anticipación, deben devolver al menos el 85% del valor del pasaje.
Respecto del equipaje, los consumidores tienen derecho a que llegue en buenas condiciones a su destino. Si el equipaje va en la bodega del bus, la empresa de transporte es responsable de daños o pérdidas. Los pasajeros deben exigir un comprobante de entrega por cada pieza de equipaje depositada en la bodega. Si el valor del equipaje supera las 5 UTM, es importante declararlo mediante un formulario que servirá como prueba en caso de daños o pérdidas.
Sin embargo, si las especies están en la parrilla portaequipajes interiores, son responsabilidad de los pasajeros, a menos que sean situaciones atribuibles directamente a la empresa.
Es importante recordar que los buses interurbanos sólo pueden tomar o dejar pasajeros en terminales y paraderos autorizados, lo que garantiza un mayor control y seguridad en el acceso y descenso de los usuarios. Está estrictamente prohibido para estos buses detenerse en cualquier lugar de la carretera. En viajes de más de 5 horas de duración, la empresa deberá solicitar la información de cada pasajero a bordo.
Además de comprobar que el bus interurbano que vayas a utilizar esté inscrito en el Registro Nacional de Transporte Público del MTT, es importante que tenga su documentación al día, como revisión técnica, Seguro Obligatorio de Accidentes Personales y el permiso de circulación.
