El Servicio Nacional del Consumidor (SERNAC) tomó la decisión de presentar una demanda colectiva contra la empresa sanitaria ESVAL por fallas en la prestación de sus servicios, en especial, por un extenso corte de agua que tuvo lugar entre el 8 y 14 de enero, afectando a más de 33.000 usuarios, principalmente de las comunas de Calle Larga y Los Andes.
A esto, se suma una serie de cortes no programados entre los años 2021 y 2023, que afectaron a más de un millón de clientes en la Región de Valparaíso.
La empresa alegó que los cortes fueron resultado de un fenómeno meteorológico de fuerza mayor, por lo cual los usuarios no tendrían derecho a compensaciones.
Sin embargo, de acuerdo con lo señalado por el propio SERNAC, los informes de la Dirección Meteorológica de Chile y del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (SENAPRED) señalaron que estos fenómenos fueron previsibles y que, por ende, la empresa debería haber tomado medidas preventivas para asegurar la continuidad del servicio.
Además de la falta de prevención, ESVAL no habría comunicado a los usuarios sobre la suspensión del servicio, evitando que estos pudieran tomar medidas para enfrentar la situación. Esto forzó a muchos a recurrir a fuentes alternativas de agua potable, incurriendo en gastos adicionales.
El SERNAC ofició a la empresa para conocer las medidas de mitigación implementadas, pero no obtuvo respuesta satisfactoria. “La responsabilidad de las empresas es aún mayor, pues son esenciales para las familias y para el desarrollo de la vida en comunidad, por lo que su falta provoca un grave daño a los consumidores, particularmente a los más vulnerables”, aseguró Andrés Herrera, director del SERNAC.
En tanto, el gobernador regional de Valparaíso, Rodrigo Mundaca, respaldó la acción legal, señalando que los cortes de agua no programados afectan seriamente la vida normal de las personas. “La cifra es increíble, son más de 2.250 cortes no programados entre el año 2021 y el año 2023, lo que es grave porque cuando una familia se queda sin agua se altera la vida normal. Ni decir lo que ocurrió entre el 8 y el 14 de enero pasado, afectando a miles de consumidores de Calle Larga y Los Andes”, indicó.
Además de la situación del corte en enero, la demanda también se basa en más de 2.250 cortes no programados que se produjeron entre 2021 y 2023, sin que la empresa compensara adecuadamente a los usuarios. La Ley del Consumidor establece que en casos de cortes injustificados, las empresas deben aplicar descuentos automáticos a los usuarios. Asimismo, desde diciembre de 2021, la ley exige que se informe en las boletas de cobro el tiempo que el servicio se encontró interrumpido, obligación que tampoco habría cumplido ESVAL.
La demanda presentada por el SERNAC busca que ESVAL compense a todos los usuarios afectados y que se aplique una multa de 1.800 UTM ($113 millones de pesos), por cada uno de los usuarios afectados por los cortes denunciados.
La respuesta de ESVAL
A través de una declaración pública, la empresa sanitaria expresó que aún no ha sido notificada de esta demanda por parte del SERNAC y que entregará toda la información necesaria para aclarar la situación.
En ese sentido, respecto de los cortes en Los Andes y Calle Larga, la sanitaria indicó que “obedecieron a una situación de fuerza mayor, por la alta turbiedad (100 veces sobre lo normal) que provocaron las lluvias en el Aconcagua, lo que no hacia posible su potabilización en la planta de El Sauce”.
ESVAL reiteró su disposición a seguir colaborando en este proceso.
