En momentos de mayor inflación y buscando evitar que el costo de la vida aumente, muchas veces los consumidores también se han encontrado con la shrinkflation. Este fenómeno es poco conocido por su nombre, pero podría afectar el bolsillo de las personas al terminar encareciendo sus compras de alimentos, artículos de higiene personal y de aseo al hacer las compras en el supermercado.
El término shrinkflation es el acrónimo de shrink (reducir) e inflation (inflación en inglés), por lo que se puede entender como la reducción ocasionada por la inflación. En español se le conoce como reduflación.
Se trata de un fenómeno que hace referencia a la reducción del tamaño y contenido de productos, como respuesta de las empresas para mantener el mismo precio de un artículo.
Comúnmente, la shrinkflation se puede ver en paquetes de comida como arroz, fideos, snacks o bebestibles que reducen su contenido para seguir cobrando el mismo precio al que estamos acostumbrados.

Esto no solo se puede evidenciar en el mercado de los productos envasados, también esta es una estrategia utilizada por los restaurantes, los que disminuyen el tamaño de los platos que sirven. Esto pasa a afectar la valorización de estos lugares, dado que esto es algo que perjudica a sus consumidores.
En agosto, McDonald’s tuvo que hacer frente a los reclamos de consumidores de redes sociales que aseguraban que algunas hamburguesas se habían achicado. La empresa respondió que habían cambiado el pan, sin afectar la calidad ni cantidad de ingredientes. En Reddit incluso existe un canal dedicado exclusivamente al fenómeno del shrinkflation, que ya suma más de 38 mil usuarios.
Hace unos días, en Chile, Softys reconoció que había hecho ajustes en su línea de papel higiénico Confort, en su versión doble hoja de 30 metros. Según detalló BioBioChile, a principios de 2020 se redujo en 3 milímetros el ancho del papel.
“Nuestros productos van siendo ajustados de tiempo en tiempo en sus parámetros, mayormente para implementar nuevas tecnologías”, señaló la compañía al mismo medio. En este caso, se habría explicado por la llegada de la tecnología ‘Panal’.
Desde la Organización de Consumidores y Usuarios (ODECU) señalan que “si la reducción de contenido resulta engañosa para el consumidor, como por ejemplo mantener el tamaño del envase sin informar de manera destacada la reducción del contenido, puede ser inductivo de error o engaño a los consumidores e infracción a la ley del consumidor. Distinto sería si se rebaja el contenido del producto y ajusta el empaque y mantiene el precio”.
Frente a esto, señalan que las golosinas son un buen ejemplo, ya que han ido reduciendo su tamaño de forma permanente.
¿Cómo identificar la shrinkflation?
Respecto a la shrinkflation, Cristián Lecaros, gerente general de Inversión Fácil, enfatiza en que “es importante que las personas siempre se informen, vean las etiquetas y comparen lo mismos en productos de supermercados en góndolas. Lamentablemente está pasando en varios países del mundo. Ante las dudas, las personas deberían denunciar al SERNAC, creo que ese es el camino”.

Frente a esta situación, desde ODECU destacan que “las empresas pueden ofrecer productos más económicos. Hemos visto, por ejemplo, ofrecer frutas y verduras imperfectas a menor valor, productos en envases familiares con precios más convenientes o productos alternativos con precios menores”.
Por su parte, Lecaros concluyó que “las empresas para atenuar las subidas de precios, lo único que pueden hacer en términos muy generales es poder cambiar el proveedor manteniendo la misma calidad, pasar a un proveedor nacional, porque todo lo importado va a ser más caro”.
Una forma de verificar la conveniencia del precio de un producto es comparando el precio por unidad de medida (PPUM). En 2003 entró en vigencia una norma que estableció la obligatoriedad de implementar esta información en los artículos que comercializan los supermercados, lo cual es visible en la etiqueta de precio junto al fleje. Esto permite comparar el precio por kilo, litro o dimensiones entre productos de distintas marcas o formatos.