En los últimos cinco años, las investigaciones de la Policía de Investigaciones (PDI) y Carabineros por el uso fraudulento de tarjetas se triplicaron.
Si en 2014 el número de indagatorias llegaba a 16.380, el año pasado alcanzaron los 63.220 casos, lo que representa un 286% más, de acuerdo a una nota publicada por La Tercera.
El aumento se explica por el mayor uso de dinero plástico entre los chilenos y a que los delincuentes han descubierto nuevos mecanismos que se aprovechan de vulnerabilidades de seguridad.
“Los delincuentes se han percatado de falencias que todavía debemos solucionar a través de la mejora en los estándares de seguridad”, explicó el subprefecto Cristián Lobos, jefe de la Brigada de Delitos Económicos (Bridec) de la PDI.
Desde el OS 9 de Carabineros señalan que la técnica del ‘skimmer’ ha evolucionado hacia otras modalidades. “Como instrumentos falsos en dispositivos móviles e intromisión en los sistemas, donde se saca y almacena la información”, señaló el jefe de la unidad, el coronel Juan Francisco González.
Desde la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras (ABIF) se defienden y dicen que la banca toma medidas. “La tasa de fraude en tarjetas en Chile es aproximadamente un tercio respecto a la tasa de fraude a nivel mundial”, señalaron en un comunicado difundido también por La Tercera.