El CyberDay terminó el miércoles por la noche, y si bien muchas marcas decidieron extender sus promociones, quienes compraron durante el periodo original comienzan a recibir los productos en las puertas de sus casas.
Con la promulgación y entrada en vigencia de la Ley Pro-Consumidor en nuestro país, es importante tener en cuenta los derechos de los compradores para protegerse y exigir los derechos como el retracto y la garantía legal.
Desde Conadecus destacaron varios aspectos fundamentales a considerar durante este periodo. Los comercios ahora están obligados a proporcionar a los consumidores información precisa y completa sobre el producto o servicio, incluyendo el precio total con los gastos de envío, la disponibilidad de stock y las características relevantes del producto.
Entre los cambios más significativos introducidos en la Ley del Consumidor, se encuentra la ampliación de la garantía legal de 3 a 6 meses. Este cambio permite a los consumidores ejercer su derecho a una garantía si el producto que han comprado llega en mal estado o presenta fallas técnicas atribuibles a defectos de fabricación. Esta garantía legal aplica para condiciones normales de uso.
Además, se estableció de forma más clara el derecho al retracto, permitiendo a los consumidores arrepentirse de compras electrónicas, telefónicas o por catálogos dentro de los 10 días posteriores a la recepción del producto o contratación del servicio. Este derecho es especialmente relevante en casos en los que el consumidor no tuvo acceso físico al producto o servicio en el momento de la compra. Adicionalmente, si la empresa no envía una confirmación escrita del contrato, el plazo de retracto se extiende a 90 días.
Estos derechos se aplican a todas las modalidades de compra online, ya sean en línea o por teléfono. Por tanto, todos los consumidores tienen el derecho a recibir información precisa y veraz, a que se respeten los precios anunciados y a recibir el producto o servicio que se les prometió.
Conadecus instó a los consumidores a realizar compras en comercios establecidos y a solicitar siempre información contractual por escrito, como medida para proteger sus derechos. El mensaje es claro: consumir de manera informada y segura es fundamental para proteger los derechos del consumidor.
