27 páginas tiene la ordenanza municipal que la Municipalidad de Pucón aprobó a fines de diciembre y que comenzó a regir para este verano, la cual restringe los denominados arriendos informales a través de plataformas digitales como Airbnb y Booking.
La normativa tiene como objetivo regular los servicios de alojamiento de la comuna, la cual es muy visitada en los meses de verano. De esta forma se crea un Registro Municipal de Alojamientos Turísticos, con todos aquellos que pagan sus patentes municipales.
Además, se implementará otro registro que será para los irregulares, para quienes ofrezcan alojamiento de forma ilegal o fuera de la ordenanza municipal, y que se irá alimentando de las fiscalizaciones que realicen sus funcionarios y de las denuncias que se reciban.
Lo sorprendente de la ordenanza es que, además de las sanciones que recaerán sobre los dueños de los alojamientos irregulares (como alguien que arrienda su departamento por unos días) e incluso sobre las mismas plataformas que publican los avisos, también establece multas a quienes arrienden este tipo de propiedades.
Sin embargo, la normativa busca que los turistas se transformen en verdaderos “sapos”: Si llegas a tu alojamiento, compruebas que no tiene los permisos y haces la denuncia a la municipalidad, te salvarás de la multa.
Además, en el caso de condominios y edificios, hace también responsables a los administradores en caso de que un inmueble que corresponde a un copropietario infrinja la norma, a menos que demuestre haber hecho gestiones que busquen cumplirla.
Las multas podrán ser entre 3 y 5 UTM (de $149.169 a $248.615), las cuales pueden ser aplicables a los dueños de las propiedades, las plataformas que publican anuncios e incluso a los arrendatarios. Además, el alojamiento se expone a la suspensión de actividades e incluso a su clausura.
La ordenanza rige sobre todo tipo de alojamientos, tales como refugios, apart hotel, hospedaje familiar, hostales, hoteles, albergues, hosterías, lodges, moteles, Resort, cabañas, bed & Breakfast, y alojamientos rurales.
Una curiosa normativa considerando que en la última década las sucesivas administraciones municipales de Pucón han sido responsables del colapso de la columna en febrero y de la proliferación de arriendos baratos, donde también influye la entrega de patentes comerciales para locales de comida rápida en calles como Ansorena y la autorización de teams de verano en las playas y calles de la comuna lacustre.
