La Fundación Veg presentó una sus nuevas Guías Alimentarias, enfocadas en promover una dieta 100% basada en plantas.
Esta propuesta llega en un momento clave para Latinoamérica, región que enfrenta un incremento en los índices de enfermedades crónicas no transmisibles, donde la alimentación juega un papel fundamental, dicen desde la organización.
Estas guías, disponibles para descarga gratuita a través de internet, buscan orientar a la población hacia decisiones alimenticias informadas y conscientes, destacando los beneficios de una alimentación libre de productos de origen animal.
Según Agustina Coronel Levaggi, Coordinadora de Campañas Alimentarias de la Fundación, la iniciativa surge como una respuesta a la falta de actualización en las guías alimentarias tradicionales y la necesidad de incorporar consideraciones éticas y medioambientales en nuestra dieta.
“Se ha dejado de lado la nueva evidencia en salud y las necesidades recientes de la población, además del factor ético y medioambiental inherente. Con esta propuesta, ofrecemos una alternativa ética, saludable y sustentable a esos documentos, que pueden servir de hoja de ruta para la población general, así como para instituciones públicas y privadas que busquen realizar cambios de hábitos alimentarios alineados con los beneficios al medio ambiente y la salud”, afirma Coronel.
Una solución a los desafíos de salud y medio ambiente
La transición hacia una dieta basada en plantas no solo es vista como una vía para combatir enfermedades cardiovasculares, reduciendo el riesgo en un 32% —dicen los impulsores de esta iniciativa—, sino también como una estrategia para disminuir el impacto ambiental.
Se acusa que la producción de carne, altamente demandante en recursos hídricos y generadora de gases de efecto invernadero, es uno de los principales contribuyentes al cambio climático y la pérdida de biodiversidad.
Estas guías de la Fundación Veg destacan la diversidad y riqueza nutricional que el reino vegetal y fungi ofrecen, adaptándose a las particularidades culturales y nutricionales de los países latinoamericanos. En contraposición a las recomendaciones tradicionales que incluyen el consumo de lácteos y carne, estas guías promueven el agua potable como bebida principal y otorgan un lugar preponderante a vegetales y frutas.
Esta iniciativa está pensada tanto para aquellos que ya siguen una dieta basada en plantas como para la población general, invitando a todos a considerar el cambio hacia hábitos más saludables y sostenibles.
