Consciente de las dificultades que enfrentan las mujeres que han superado el cáncer mamario y se han sometido a una mastectomía, Beatriz Palma fundó “My Nipp”. Es un emprendimiento dedicado a la fabricación de pezones de silicona con el propósito de restaurar la confianza y la plenitud de estas valientes mujeres.
Esta femtech trabaja de la mano con una fábrica especializada en prótesis personalizadas para desarrollar pezones de silicona hiperrealistas. Utilizan una técnica avanzada que incluye la extrusión del complejo aerola-pezón.
¿Su objetivo? Proporcionar una alternativa indolora y no invasiva para todas aquellas mujeres que desean recuperar parte de lo que perdieron en su batalla contra el cáncer.
“El discurso que existe en la actualidad es: ‘¿A ver? Estás viva, no pidas más. No pidas que te hayan quedado pechugas o un pezón. Ya no tienes cáncer’. Pero hay veces que los coletazos que quedan a nivel emocional y físico, post cáncer, son más fuertes que el mismo cáncer. Muchas mujeres no pueden ni siquiera dar el siguiente paso’, señaló la emprendedora detrás de My Nipp.
Micropigmentación paramédica: la herramienta para devolver la confianza
Beatriz Palma, arquitecta de profesión, nació con una fisura palatina que la llevó a enfrentarse a más de once cirugías en la nariz y la boca desde temprana edad. Esta condición no solo dejó cicatrices físicas, sino que también impactó en su autoestima. Sin embargo, en lugar de permitir que estas dificultades la limitaran, la emprendedora las transformó en un motor de vida.
Después de dos años ejerciendo su carrera en arquitectura, decidió seguir su verdadera pasión: el maquillaje. Comenzó maquillando a novias y madrinas, descubriendo en este arte una forma de crear magia y confianza en cada mujer que pasaba por sus manos.
Así es como a medida que exploraba diferentes técnicas de maquillaje, se adentró en el mundo de la micropigmentación paramédica. Es una disciplina con diversas aplicaciones en el ámbito de la estética destinada a reparar o realzar rasgos en pacientes, incluso permitiendo disimular cicatrices.
“Cuando uno dibuja en 3D, uno tiene que definir de donde viene la luz, desde donde debe ser mirado para que el dibujo funcione. Entonces un pezón 3D solo funciona si tú lo miras de frente, pero la relación de una mujer con su pezón no es frente al espejo, es desde arriba, desde sus ojos hacia abajo, su propio pecho”, explica la profesional.
En su estudio, no solo se trata de aplicar pigmentos, sino de devolver la mirada de amor y aceptación a cada mujer que pasa por su puerta. Cada prótesis es pintada a mano por Beatriz, personalizada según los deseos de la paciente, brindando así una experiencia única.
Para muchas mujeres, esto va más allá de la estética. Es una oportunidad para recuperar la confianza y la sensación de normalidad en sus vidas diarias, desde la elección de un traje de baño hasta la intimidad de su propia imagen en el espejo.
My Nipp y la lucha por una recuperación digna
A pesar de la importancia que posee la micropigmentación paramédica para las sobrevivientes de este tipo de cáncer, las Garantías Explícitas de Salud (GES) no consideran la reconstrucción completa del seno, sino únicamente su volumen del mismo. Esto deja a miles de mujeres con la esperanza de recuperar parte de sí mismas, pero sin los recursos necesarios para hacerlo.
“La persona queda fuera de la ecuación. No te cubre nada para prótesis, ni para tatuajes. Por lo mismo, nosotros estamos empujando que se pueda incorporar nuestras prótesis externas como parte del GES. Buscamos así que más mujeres puedan acceder a una reconstrucción digna”, indicó la creadora del emprendimiento.
Con esta visión en mente, “My Nipp” se esfuerza por garantizar una recuperación digna para aquellas que han sobrevivido a enfermedades tan devastadoras como el cáncer, un compromiso que ha dado resultados tangibles. En mayo de 2023, el emprendimiento fue galardonado por el fondo Talento Emprendedor (TECLA) de Caja Los Andes, en la categoría de “Consolidación”.
Entre sus planes y proyecciones para este año, Beatriz y dos colaboradores planean postular nuevamente a la séptima edición de este premio. Está vez piensan hacerlo en la categoría de “Internacionalización”.
“Este proyecto ha crecido mucho en un periodo tan cortito y ya estamos viendo las posibilidades de expandir las alas y poder llegar a Latinoamérica y España. Este emprendimiento es puro amor circular porque es de mujeres para mujeres”, indicó Palma.
Asimismo, la creadora de My Nipp destacó que lo más relevante es “enamorarse del problema. Si nos vamos para mi historia, yo pude comprender que yo también tenía una cicatriz y también quería volver a sentirme segura y linda”, concluyó la fundadora.
