Planificar unas buenas vacaciones no tiene por qué significar gastar una fortuna. Hoy, con la ayuda de la tecnología y un poco de organización, es posible viajar a distintos destinos sin salirte del presupuesto. Lo primero es encontrar vuelos baratos, y desde ahí armar tu viaje de forma inteligente, priorizando lo que realmente te interesa y aprovechando oportunidades que muchas veces están más cerca de lo que crees.
A continuación, te mostramos cómo organizar unas vacaciones accesibles y disfrutar al máximo sin poner en riesgo tus finanzas.
Elegir destinos en función del presupuesto
Uno de los principales errores al organizar un viaje económico es enamorarse de un destino sin considerar cuánto cuesta llegar o mantenerse ahí. Una buena estrategia es hacerlo al revés: primero buscar qué lugares están más accesibles en términos de vuelo y alojamiento, y luego elegir el destino que más se ajuste a tu bolsillo.
Plataformas como Despegar permiten comparar múltiples opciones desde distintas ciudades del país. Muchas veces aparecen ofertas inesperadas hacia lugares que no tenías en el radar, y que terminan siendo una experiencia inolvidable.
Jugar con las fechas: la clave para ahorrar
Las fechas son determinantes al momento de encontrar tarifas convenientes. Si puedes viajar fuera de temporada alta o mover tu itinerario unos días hacia adelante o hacia atrás, es muy probable que encuentres precios mucho más bajos, especialmente en pasajes aéreos.
Viajar durante la semana, especialmente martes o miércoles, suele ser más económico que hacerlo viernes o domingo. Además, los meses de temporada baja como marzo, mayo o noviembre ofrecen menos demanda, por lo que los precios bajan en todos los servicios turísticos, no solo en vuelos.
Buscar paquetes y servicios combinados
Otra buena forma de ahorrar es cotizar paquetes que incluyan vuelo más alojamiento, o vuelo más auto. Estos combos muchas veces tienen descuentos adicionales y permiten tener mayor control del gasto total desde el principio.
Además, algunas plataformas ofrecen la posibilidad de pagar en cuotas sin interés o acceder a promociones bancarias, lo cual también puede ayudar a organizarse mejor financieramente.
Considerar alojamientos alternativos
No siempre es necesario quedarse en un hotel tradicional. Hoy existen muchas opciones de alojamiento que se ajustan a distintos presupuestos: hostales, departamentos por día, cabañas o incluso casas compartidas. Estos lugares no solo son más económicos, sino que también te permiten ahorrar en comidas al contar con cocina propia.
En muchos casos, elegir un alojamiento más alejado del centro turístico principal también puede hacer una gran diferencia en el precio.
Comer rico sin gastar de más
La comida es otra parte importante del presupuesto. Para no excederse, una buena idea es combinar experiencias: algunos días salir a comer a restaurantes típicos, y otros aprovechar ferias locales, mercados o incluso cocinar tú mismo con productos del lugar.
Además, en muchas ciudades turísticas existen menús del día o “menús ejecutivos” a precios muy razonables, ideales para conocer la gastronomía local sin romper el presupuesto.
Actividades gratuitas o a bajo costo
Cada destino tiene su propia agenda de actividades, y muchas de ellas son gratuitas o muy baratas. Museos con entrada liberada ciertos días, paseos guiados a la gorra, caminatas por parques nacionales, festivales locales, muestras culturales… solo es cosa de buscar con anticipación.
También podés seguir cuentas en redes sociales del lugar que vas a visitar, donde suelen compartir eventos gratuitos y panoramas accesibles.
Viajar ligero: otra forma de ahorrar
Si tu vuelo no incluye equipaje en bodega, viajar solo con equipaje de mano puede ayudarte a ahorrar. No solo evita pagar extra, sino que también facilita los traslados y ahorra tiempo en el aeropuerto.
Además, viajar liviano permite mayor movilidad si decides cambiar de alojamiento o moverte a otra ciudad durante tu viaje.
Destinos económicos para tener en cuenta
Si estás pensando en viajar desde Chile sin gastar mucho, algunos destinos que suelen tener buenas tarifas son:
Regiones dentro de Chile: el norte y sur del país tienen paisajes increíbles, buena infraestructura turística y vuelos accesibles si se reservan con tiempo.
Lima: ideal para quienes buscan cultura y gastronomía a bajo costo.
Buenos Aires: por cercanía y variedad de actividades gratuitas.
Río de Janeiro o São Paulo: si estás atento, puedes encontrar muy buenas promociones hacia Brasil.
