“Bank of Dave”, disponible en Netflix desde hace algunas semanas, narra la inspiradora historia de Dave Fishwick, interpretado por Rory Kinnear. La película, dirigida por Chris Foggin, está basada en hechos reales. Nos lleva a través de la travesía de este hombre en su lucha por establecer un banco comunitario en su ciudad natal, Burnley.
Este lugar, alguna vez el pueblo de molinos más productivo y rentable del mundo, ha decaído hasta convertirse en uno de los más desfavorecidos del Reino Unido.
El inicio de la trama nos muestra a Fishwick como un exitoso vendedor de minibuses en su ciudad. En respuesta a la última crisis financiera, empieza a prestar dinero a sus clientes y negocios locales con bajas tasas de interés.
Estos actos de generosidad y solidaridad empresarial dan pie a una idea audaz: crear un banco local que utilice dinero local para financiar empresas locales. Sus utilidades las donaría a beneficencia. Así nace el concepto de “The Bank of Dave”.
Sin embargo, las autoridades financieras de Londres —que no habían otorgado una nueva licencia bancaria en más de 150 años— no ven con buenos ojos la iniciativa de un vendedor de furgones de Burnley. Es justamente en este conflicto donde se centra la trama. De principio a fin, muestra la lucha de David contra Goliat en el mundo financiero.
Fishwick, junto con la ayuda de un abogado londinense, Hugh (Joel Fry), y una joven doctora, Alexandra (Phoebe Dynevor), se embarca en una misión para desafiar el status quo del sistema bancario. La película, que mezcla géneros de comedia, biografía y drama, no solo es entretenida, sino que también ofrece una mirada crítica a las estructuras de poder en el sector financiero.
La historia en la que se inspiró: “Bank of Dave” existe y abrió sus puertas en 2011
La historia real en la que se basa la película es igualmente fascinante. Dave Fishwick logró abrir “Burnley Savings and Loans“, bajo el slogan “Bank on Dave!”, en 2011 con un modelo de banca local y personal.
Su enfoque en el compromiso con la comunidad lo llevaron a crecer de forma importante, ayudando a numerosas empresas y causas benéficas. Su lucha no solo se limitó a Burnley, sino que también buscó influir a nivel parlamentario para reformar la industria bancaria en UK.
“Bank of Dave” sirve también para entender las desigualdades que persisten en el sector bancario británico. Se presenta a Fishwick como un hombre preocupado por las personas más que por las ganancias, en contraste con los hombres de cuello y corbata de Londres.
Hugh, el abogado londinense que es designado para asesorar a Fishwick, viaja hasta Brunley con el objetivo de intentar disuadirlo de sus intenciones. Sin embargo, se encuentra con un carismático, entusiasta y querido líder local, quien le expone las necesidades de su pueblo.
La narrativa de “Bank of Dave” no se limita a mostrar la lucha por establecer un banco. También explora temas más amplios como la crisis de salud pública, representada por el personaje de Alexandra, quien busca abrir una clínica gratuita para aliviar la presión en el sistema de salud.
La película combina efectivamente elementos dramáticos y algo de humor, mientras mantiene un enfoque en la historia real y su relevancia en el contexto actual. De todos modos, algunos críticas señalan que la inclusión de elementos ficticios —como una escena dramática en la corte y un supuesto complot— servirían para darle más “color” a la narrativa… aunque se desvía ligeramente de los hechos reales.
