Hace unas semanas el Gobierno introdujo una serie de mejoras al Registro Social de Hogares (RSH). Estas modificaciones, anunciadas por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia, beneficiarán a 779 mil hogares, debido a los cambios en la forma de calcular la calificación económica de cada hogar
El Registro Social de Hogares es un sistema de información que permite seleccionar a los beneficiarios de subsidios y otros programas sociales. Este se confecciona gracias a los datos que brindan desde cada hogar y la información que posee el Estado. Con esto, se puede efectuar la Calificación Socioeconómica que ubica a cada domicilio en uno de los siete tramos de ingresos.
Al 2023, el RSH cuenta con más de 17,1 millones de personas inscritas. Esta cifra equivale a cerca del 86% del total de la población en Chile de este año, de acuerdo a la proyección del Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
Desde noviembre, 420 mil personas ingresaron al tramo del 60% de ingresos y otros 360 mil al del 40%. Estos tramos son los que contienen los principales beneficios que entrega actualmente el Estado en el país.
A contar de mayo de este año, la calificación socioeconómica se actualiza quincenalmente, con lo que se reduce el tiempo de espera para cambios. Si estás inscrito en el RSH, puedes revisar si se realizaron cambios automáticos a tu calificación en el sitio http://www.registrosocial.gob.cl.
Uno de los aspectos claves que fue modificado en el RSH es la actualización de los valores máximos de ingresos en los diferentes tramos de la Calificación Socioeconómica. Esto se realizó con base en la Encuesta Casen 2022 y reemplazó los estándares previamente establecidos en la Casen 2017.
Esta actualización tiene como fin representar de mejor forma los ingresos reales de los hogares chilenos, ajustándose a la realidad económica tanto de las familias como del país.
Otro de los cambios en el Registro Social de Hogares es la integración del Registro Nacional de Deudores de Alimentos. Esta medida permite identificar automáticamente a aquellos individuos que no han pagado las pensiones de alimentos. De esta manera, estas pensiones impagas no se contabilizarán como ingreso en las evaluaciones socioeconómicas de los hogares donde residan los hijos beneficiarios.
En cuanto a las fuentes de información relacionadas con la dependencia y discapacidad, se optó por incorporar diversas fuentes administrativas. Esta medida tiene como objetivo simplificar la acreditación de situaciones de dependencia, discapacidad e invalidez.
Parte de las fuentes de información que se tomarán en cuenta en el Registro Social de Hogares serán: Subsidio de Discapacidad para niños, niñas y adolescentes; Pensiones Básicas Solidarias y Aportes Previsionales Solidarios.
Finalmente, se tomó la decisión de reconsiderar cómo se tratan las pensiones de reparación en el cálculo de la Calificación Socioeconómica. Esto porque, no se considerarán en la Calificación Económica el dinero entregado a las personas por los informes Rettig y Valech, ni por ser exonerados políticos.
Esta última variación se anunció en septiembre de este año, en el marco de la conmemoración de los 50 años de la dictadura cívico militar.
